
El Dr. Héctor Nakayama, destacado docente e investigador del Centro Multidisciplinario de Investigaciones Tecnológicas de la Universidad Nacional de Asunción (CEMIT-UNA), dejó una huella imborrable en el campo de la biotecnología. Su trayectoria comenzó en el Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Salud (IICS-UNA), donde adquirió un profundo interés en las metodologías y técnicas investigativas, que serían fundamentales en su carrera. Esta experiencia le permitió desarrollar habilidades cruciales para su posterior incorporación al CEMIT-UNA en el 2006.
En el centro multidisciplinario, el Dr. Nakayama se propuso impulsar el área de biotecnología, que en ese momento se encontraba aún en etapa inicial. Desde su llegada, su trabajo fue fundamental en la expansión y consolidación de esta disciplina, al marcar el inicio de la etapa de crecimiento y desarrollo en el centro. Tras su reciente jubilación, su legado aún es fuente de inspiración para las nuevas generaciones de investigadores.
Nakayama comentó que, durante su carrera, estableció varias líneas de exploración y tuvo la oportunidad de interactuar con más investigadores, lo que contribuyó a la formación del actual equipo de biotecnología. “Esta nueva incorporación de talentos ha logrado obtener resultados y productos significativos”, indicó.
Compromiso con la formación
Además de su trabajo en biotecnología, el Dr. Nakayama fue una figura clave en la creación y organización de las Jornadas de Jóvenes Investigadores (JJI-UNA), desde el 2006. Explicó que el programa nació con el objetivo de fomentar el talento joven en la investigación, al proporcionar un espacio para que las y los investigadores emergentes presentaran sus trabajos y establecieran un impacto en la sociedad paraguaya. “Estoy muy orgulloso porque el programa se convirtió rápidamente en un semillero de talento dentro de la UNA y demuestra un compromiso continuo con la formación de nuevas generaciones de científicos”, expresó.
Por último, ofreció un mensaje alentador a estudiantes y especialistas en investigación sobre la importancia de la curiosidad en las indagaciones, ya que es un recurso que impulsa el deseo de explorar y entender el mundo. En este sentido, animó a las y los aspirantes a abordar la investigación con curiosidad, rigor y pasión, convencidos de que estos valores pueden llevar a grandes logros. También, subrayó que la investigación no debe verse solo como una opción filantrópica, sino como una carrera viable con amplias oportunidades.