
Cada 21 de septiembre se recuerda a nivel nacional el Día del Kinesiólogo y Fisioterapeuta, fecha en que se obtuvo la personería jurídica de la Asociación de Kinesiólogos y Fisioterapeutas del Paraguay. La FCM-UNA contribuye con la salud pública y la sociedad en general con la formación de primer nivel de estos profesionales que aportan no solo a la rehabilitación del paciente, sino en muchos casos, trabajan en la prevención.
La Lic. Ruth Ortiz, coordinadora Académica de la carrera de Kinesiología y Fisioterapia de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Asunción, informó que la carrera tiene una duración de cinco años. Actualmente cuenta con una malla innovada. «La FCM-UNA tiene un sistema de formación de residencias en el postgrado, la única en Paraguay que forma kinesiólogos generales, con un énfasis en las diferentes especialidades de la carrera. Estas se enfocan en Rehabilitación Cardiorrespiratoria, Rehabilitación de Lesiones músculo-esqueléticas, Traumatológicas y Ortopédicas, además Rehabilitación Neurológica», resaltó.
En tanto, los estudiantes de grado también tienen un sistema de residencia que dura dos años y egresan con el título de Especialista en Kinesiología General. En caso que quieran optar por una subespecialidad, cuentan con cursos de especialización en convenio con la Dirección de Postgrado de la FCM-UNA, trabajando en programas de especialidades específicas de acuerdo a la demanda en el mercado. La carrera dispone de un cupo de 40 lugares por año para los postulantes que se presenten al sistema de admisión. Las clases del primer año se desarrollan en la sede del edificio de Ciencias Básicas, ubicado en Sajonia, y a partir del segundo año, los estudiantes deben asistir a la sede de la ciudad de San Lorenzo.


Respecto a la contribución del egresado de la FCM-UNA a la salud pública y a la sociedad en general, la Lic. Ortiz dijo que tienen una función importantísima dentro del equipo multidisciplinario. Detalló que la intervención inicia desde la prevención, educación del paciente, el tratamiento en las etapas subagudas y crónicas. Agregó que la última etapa es la rehabilitación y la reincorporación del paciente a sus actividades.
«Tratamos de devolverle a la funcionalidad de manera a que se incorporen a sus actividades de la vida diaria, al ambiente social y laboral», acotó.
Nota y fotografías: Gentileza FCM-UNA.