
Cada vez es más común encontrar mangos con la reconocida mancha negra en su cáscara y desecharlos sin conocer lo que conlleva esta enfermedad del reino de las plantas. Un tema muy recurrente en los pasados días fue el cancro, que afecta a los mangos de nuestro país y que ha aumentado su incidencia dentro de nuestro territorio. El Dr. Adans Colmán, investigador del Área de Protección Vegetal, de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Asunción (FCA-UNA) compartió algunas cuestiones relacionadas al consumo de la fruta, tratamiento y prevención, que son importantes tener en cuenta para conocer y hacer frente a la bacteria responsable: la Mangifera indica L.

Según la última investigación del Dr. Colmán, en conjunto con su par brasilero, el Dr. Jorge Badel, de la Universidad Federal de Vicosa, demostraron que la mancha es producida por la bacteria Mangifera indica L., que es capaz de afectar, además, otras partes como las hojas, las ramas y las flores. Añadió también que la enfermedad produce las condiciones necesarias para la proliferación de otros patógenos como hongos y para la reproducción de la mosca de la fruta.
El investigador nacional hizo énfasis en que las bacterias que afectan al reino plantae no afectan al reino animalia, ya que se tratan de organismos muy diferentes entre sí. En ese sentido, recomendó prestar especial atención al aspecto de la fruta antes de consumirla y realizar una correcta disposición de los desechos, entre otras estrategias.
Consumo, disposición y prevención
El consumo de la fruta afectada es seguro. Basta con remover el sector visiblemente afectado, ya que su sabor y textura pudo haberse comprometido en la zona negra o puede contener larvas de la mosca de la fruta. Cortá la zona afectada y disfrutá de tu mango.



Lo que no es seguro para tu planta es que dejes la parte afectada en contacto con el aire. Cuando cortás el pedazo incomible, tenés que enterrar el desecho; ya que, en caso contrario, puede continuar con su ciclo de afectación, por lo que se recomienda cavar un pozo y depositar bajo tierra todas las partes afectadas de la planta como las frutas, ramas, flores y hojas.
Al respecto, una de las principales vías para prevenir otra infestación es la correcta poda de los mangos, que se realiza en los meses de abril y mayo, según el experto de la FCA-UNA. Añadió que también se deben aplicar productos basados en cobre en las zonas afectadas. Esto ayuda a prevenir la enfermedad, que remarcó que no tiene cura; sino que se debe esperar a la época de poda y eliminar las partes que contengan la bacteria correctamente.
Durante esta época de abundancia de mango consumilo con seguridad y desechalo con responsabilidad.